Hojas secas.

miércoles, 1 de agosto de 2012

Querida Gin, tonic.

Es el momento de escribirte lo que nunca fui capaz de decirte. Aunque sea tarde, escribir  lo que ha sucedido en una carta que no te voy a mandar, que no vas a recibir nunca, que como tu me enseñastes, en cuanto acabe de escribirla la quemaré. Mis sentimientos se pondrán a arder y así luego... ¿cómo era...? Como decías tu, ah, si ya. Así el dolor no se te queda tan dentro. Esta vez solo quiero ser claro. Seria un imbécil si no gritara que me he equivocado, contigo. Que ha acabado, pero bien. Pero al principio intentas no avanzar, sin no cantar antes las cosas que me lo impedían. Ahora vamos al pasado, mirando para atrás. Queriendo olvidar, pero sin parar de recordar. Que miro a un lado y al otro, sin perdonar, sin perdonarnos, sin avanzar. Es casi un reto lo del futuro Gin, solo es fijarse bien, en avanzar, mirar mas cerca. Tan cerca que lo borroso se vuelve nítido, se vuelve claro, claro... Hay cosas que han empezado antes. No quiero esperar milagros, solo que las cosas pasan. Si, no, si, no... Yo ahora lo tendría claro. ero la duda no la tengo de mi, si no de ti. Te quiero.

No hay comentarios: