Hojas secas.
martes, 11 de septiembre de 2012
¿Alguien que me rescate?
¿Hay alguien que me quiera por ahí?Mi secreto pesa. Lo llevo atado al cuello con una soga que cada día aprieta un poco más. Siento esa cuerda invisible cuando cierro los ojos y cuando los abro. Cuando miro, en la soledad de una noche que no me deja dormir.Quisiera ser feliz pero no puedo. No puedo. No puedo. Y le prometo a todo el mundo que quiero: quiero ser feliz. De verdad. Per ¿puede serlo alguien sabiendo que no puede tener lo que más desea?Debo conformarme. Pasar a otra página del libro. Ignorar lo que dicta mi corazón. Decidir de una vez por todas que todo está perdido.Admitir el final.Sin embargo, no es tan sencillo renunciar. No es nada fácil olvidar que lo que sientes no se va a ir, que se va a quedar.Y mañana al despertar volveré a sentir la misma impotencia y la misma angustia por seguir sintiendo lo que siento.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario